Un partido de fútbol Arzúa – Melide con duas crónicas

Con motivo das festas do Carme do ano 1925, na tarde do 16 de xullo enfrentaronse en Arzúa os equipos “Fortuna Arzuano” e o “Athletic Mellidense”. O curioso e que o xornal El Ideal Gallego publicou duas crónicas deste partido de fútbol: unha o día 21 e outra o día 23. Na primeira infórmase de que o resultado foi 1-2 e que o Fortuna xogaba co equipo resesrva. Na segunda (enviada desde Melide) dise que gañou o equipo de Melide 1-3 e que o equipo arzuán estaba reforzado con elementos de Santiago e Vigo.

Vexamos a primeira crónica:

EN ARZÚA

ARZÚA, 20

En la tarde del 16, contendieron el “Athletic Melidense” y el rerserva del “Fortuna Arzuano”, obteniendo la victoria el primero, por dos “oals” a uno.
La actuación del árbitro don Luís Fernández, fué muy imparcial.
Por el reserva del “Fortuna Arzuano”, se distinguieron Riobóo, Pardo, Lence, Quintela, el guardameta Varela, Portela y Paredes.

O mesmo xornal publicou estoutra nova o día 23 do mesmo mes:

DE MELLID

Con motivo de las fiestas que hubo en Arzúa, el día del Carmen, 16 de julio, se celebró en dicha villa un partido revancha entre los equipos “Fortuna Arzuano”, de Arzúa, reforzado con elementos de Santiago y Vigo, y el “Athletic Mellidense”, de Mellid, venciendo los “athléticos”, por tres goals a uno.

Arbitró don Luis Fernández Nóvoa, que estuvo imparcial.

Se distinguieron por el “Athletic” Taboada, Julio, Romero, Quintela y Quintero, que estuvo colosal, y por el “Fortuna”, Paredes, Varela, Portela, Rafael Pardo, Carmona del “Pirelli”, de Santiago, y Rioboo, del “Alfonsino.”, de la misma ciudad, que jugó horrores.

El campo del fortuna era pésimo.

A pillería de Arzúa ataca ao coche-correo

O xornal “O telegrama, diario de la tarde, imparcial de noticias” reproduxo na súa “Sección de Galicia” o 3 de marzo de 1884 unha nova publicada por outro xornal “El libredón”. O texto copiado literalmente di:

Leemos en “El libredon” del viernes:

“Días pasados ocurrió en la villa de Arzúa un hecho que cede en desprestigio de la cultura de sus habitantes y que la autoridades, si fueran un poco más activas y celosas, debieran haber evitado.

Al pasar el coche-correo que viene con dirección á Santiago por las calles de aquel pueblo fué detenido por una turba de vagabundos y desharrapados mocetones que la tomaron con el mayoral á quien insultaron de la manera más brutal y salvaje.

Los viajeros en vano trataban de calmar a los contendientes y el escándalo, por el contrario, iba cada vez más en aumento.

Las autoridades encargadas del buen orden y régimen de la población no dieron ni un solo paso para remediar este tumulto, ni tampoco castigaron como se merecía a los culpables, lo cual llenó de admiración y asombro a los viajeros que venían en el coche, que de seguro no habían de formar mal concepto de la gente de Arzúa, a quien supondrían más bien un pueblo del África que de Europa”

O xuiz de Arzúa actuou contra o arcebispo de Santiago na I Guerra Carlista

No marco da I Guerra Carlista o arcebispo de Compostela, frei Rafael Vélez foi desterrado por financiar aos carlistas, e este feito está relacionado con Arzúa.

Nunha nota a pé de páxina do libro El carlismo gallego, do profesor Xosé Ramón Barreiro Fernández podemos ler que nun proceso de 1834 contra o párroco de Pantiñobre o carlista Manuel López (da facción de Antonio López) declarou que o arcebispo de Santiago axudou a causa con 13.000 duros (nota 228 páxina 141). No mesmo libro podemos ler que o arcebispo Rafel de Vélez era a cabeza visible do carlismo galego (presidente da “Junta gallega”) e que foi desterrado en 1835, aínda que non como resultado dun xuizo, se non por unha disposición administrativa do Capitán Xeral de Galicia, don Pablo Morillo. O Capitán Xeral decidiu desterralo sen xuizo previo xa que unha causa contra un arcebispo estaba sometida a tales peculiaridades que o proceso resultaría interminable e o proceso non causaría efecto algún. Unha mostra destas peculiaridades vese no proceso iniciado polo xuíz de Arzúa contra o arcebispo por financiar aos carlistas, e que daría lugar a unha consulta do Tribunal Supremo as Cortes, tal e como se le nunha publicación da Gaceta de Madrid do 14 de maio de 1837. Reproducimos o texto da publicación a continuación:

Los Sres. Secretarios de las Cortes con fecha 10 del actual me dicen lo siguiente:

Excmo. Sr.: Las Cortes han tomado en consideración la consulta del tribunal supremo de Justicia, que V.E. nos dirigió con fecha 22 de Marzo próximo pasado, promovida con motivo de la sumaria formada por el juez de primera instancia de Arzua contra el M. R. arzobispo de Santiago, sobre si facilitaba dinero á los facciosos; y en su vista han tenido á bien declarar, que corresponde á dicho supremo tribunal de Justicia el conocimiento de las causas criminales que por la jurisdicción Real ordinaria se hayan de formar contra los prelados diocesanos, según el decreto de S. M. de 15 de Agosto del año próximo anterior, por el que se dispuso continuara aquel tribunal entendiendo en los negocios que le eran propios, conforme a las disposiciones vigentes que no se opusiesen á la Constitución; cuya resolución no se derogó por la Real orden de 21 del mismo mes de Agosto, ni se opone á la Constitución, como se declaró por el decreto de las Cortes de 17 de Abril de 1821, que con la sancion Real estuvo en ejecución y se halla restablecido. De acuerdo de las actuales lo decimos a V. E. á fin de que poniéndolo en noticia de S. M. tenga á bien disponer su cumplimiento.

Y de Real orden lo traslado á V. S. para su inteligencia y efectos consiguientes. Dios guarde á V. S. muchos años. Madrid 12 de Mayo de 1837.=José Landero.

Vías de comunicación no partido xudicial de Arzúa en 1931

O domingo nove de novembro de 1931, na páxina 6 do xornal La Voz de Galicia, publicouse, dentro da serie “Jurisdicciones de Galicia”, a entrega IV das referidas ao partido xudicial de Arzúa. Leva por título “Vías de comunicación”, e ao igual que todas as outras, ven firmada por Heliodoro Gallego Armesto.

No son, ciertamente, los habitantes del partido judicial de Arzúa, los que más derecho tienen a quejarse por falta de vías de comunicación.


Por su parte N. cruza el ferrocarril de Palencia a La Coruña, que poco después de entrar en él, salva el puente de Samel sobre el Mandeo, en medio de un pobre y áspero paisaje, determinado por una amplia meseta, pletórica de terrenos incultos o dejados a monte, encontrando a continuación tierras sembradas al aproximarse a la estación de Teijeiro, lugar de poca importancia y escaso vecindario, asentado a 487 metros sobre el nivel del mar, y en el cual se alza la Casa Consistorial del municipio de Curtis. A 12 kilómetros de este lugar, por carretera, están las ruinas del Monasterio de Sobrado de los Monjes, que ofrecen a la contemplación del turista, con sus riquezas arquitectónicas, las huellas de su pasado esplendoroso.


Al salir de Teijeiro cruza la vía el río Carregal, y continúa por una penillanura grisácea enverdecida por los tojos, que en primavera y otoño florecen de vivo amarillo; asciende una fuerte pendiente con grandes trincheras y una vez alcanzado el punto más alto 553 metros) salva los pasos de La Illana mediante grandes desmontes y terraplenes, y sin que nada recree el espíritu por falta de arbolado y regular vegetación, pasa bajo un puente, cruza una gran trinchera y sigue descendiendo por las asperezas y revueltas de la serrana estribación de los Montes de la Tieira para detenerse en la estación de Curtis, asentada en el lugar de Osbodeos.


Al pie de la estación, siguiendo la linea de la carretera, se ha creado un nuevo barrio, pero el pueblo de Curtis queda muy lejano, por la izquierda sobre un altozano que baña el río Cabalar. Desde estación hay servicio regular de automóviles a Santiago, Arzúa y Mellid.


Volviendo desde aquí la vía al S. cruza una gran trinchera en curva, pasa bajo la carretera de Betanzos y a través de un tunel abandona la comarca arzuana para seguir descendiendo a La Coruña.


De la red de carreteras que cruzan el partido judicial de Arzúa son las más importantes la de Santiago a Lugo, la de Golada a Betanzos y la de Arzúa a Teijeiro.


La primera, después de dejar en la Labacolla la directa a la estación de Curtis, penetra en tierras de Arzúa a través de bellos panoramas, donde la vista se recrea a cada paso con la contemplación de seculares bosques de robles y castaños, y ondulándose con ligera tendencia a ascender pasa por Amenal, pequeña aldea con 14 casas perteneciente a la parroquia de San Miguel de Ferreira (¿Pereira?).


Salva después varios riachuelos de límpidas aguas y mansa corriente, cuyas orillas aparecen festoneadas por graciosos “ameneiros” y frondosos fresnos y tras algunas bruscar curvas llega a Arca, cuyo núcleo principal queda a la derecha, pero cuyas construcciones modernas forman en la carretera un nuevo barrio, en donde se concentra el tráfico.


Pasa luego la carretera sucesivamente por los diminutos lugares de San Antón, Burgo, Dos Casas y Santa Irene, y un kilómetro después deja por la derecha otra carretera a Lalín (43 kilómetros). Asciende luego, pasando por Cerceda, salva el arroyo Ferreirós, deja la aldea del mismo nombre a la izquierda, cruza el lugar de Calle y llega a Burres, parroquia con 167 vecinos distribuídos en 18 caseríos. En este lugar parte a la derecha otra carretera a Puente Ulla (32 kilómetros).


Deja después a la izquierda la aldea de Cruz, salva varios arroyos y llega a Arzúa, villa con 751 habitantes y 103 viviendas, situadas en una altura de suaves pendientes, y la cual, vista desde lejos, parece una de las fortalezas de nuestra vieja historia. su altura sobre el nivel del mar es de 400 metros y su estación ferroviaria más próxima Curtis, a 27 kilómetros. Además de la que venimos describiendo, parten de ella otras carreteras a Teijeiro y a Puente de San Justo.


Tiene buenas casas para consistorio y escuelas; su pequeña iglesia parroquial guarda una bella imagen de San Francisco y presenta al exterior un relieve en piedra del sepulcro del Apóstol Santiago. A pesar del progreso iniciado en ella de unos años acá, aún le falta mucho para estar a la altura que merece.


Su calle principal es la del Carmen. Tiene un buen capo de feria. Del convento de Agustinos que en ella existió en remotos tiempos, queda solamente el recuerdo, denominándose “el convento” el sitio en que aquel se alzaba.


Pasado Arzúa la carretera se muestra ondulada a través de bellos paisajes; salva el río Isoó por el puente de Ribadiso, inmediato a otro del antiguo camino de Santiago y próximo al lugar que le da nombre, asiento en lejanos tiempos de un Hospital de peregrinos: atraviesa sucesivamente las parroquias de Castañeda y Figueroa, y 17 kilómetros después de Arzúa llega al cruce con la carretera de La Golada a Betanzos, donde en la última década se construyó un barrio moderno, perteneciente a la villa de Mellid, cuyo núcleo antiguo asienta a la izquierda en una penillanura a 463 metros sobre el nivel del mar, con varias calles y una bonita plaza, destacando entre sus edificios la casa palacio del Marqués de Corbera, la iglesia parroquial y el convento de Santi Spiritus, con su iglesia abierta al culto y en su torre el reloj de la villa. Hay además dos ermitas.


Casi unido al pueblo está el montículo llamado “El Castro” coronado por una pequeña capilla. Debe su nombre al hecho de haber estado emplazada en él la fortaleza de Mellid, combatida en muchas ocasiones, derruida en la guerra hermandina y cuya piedra aprovechó luego Sancho de Ulloa para construir el convento.


Después de Mellid desciende la carretera para salvar el río Furelos en la aldea del mismo nombre, y desde él vuelve a ascender con muy amplias y dilatadas curvas, en un bonito paisaje, pasando por Libureiro, y en el punto más alto de la cuesta casi en el extremo S. de los Montes de Carrión, abandona las tierras de Arzúa, para seguir a través de la provincia de Lugo.


Heliodoro Gallego Armesto

O alarde e repartimento de armas do arcebispo Sanclemente

No arquivo arzobispal de compostela, dentro dun cartapacio titulado “Provisiones de guerra”, consérvase un documento do 29 de xuño do 1589 do que temos noticia por que o recolleu Antonio López Ferreiro no apéndice documental do tomo VIII da súa monumental “Historia de la Santa A.M. Iglesia de Santiago de Compostela” (1898), é o apéndice LIII.

Na “Guía de Arzúa, tierra de Quesos, Caminos y Turismo Rural”, escrita por Xosé L. Laredo Verdejo e editada polo Concello de Arzúa no 1999, no capítulo “Un poco de historia. Arzuanos ilustres” (páxina 55) recollese o seguinte:

En mayo del año 1589, arribó al puerto de A Coruña Francisco Draque con un ejército de 14.000 hombres, al mando del General Norris. Su intento era, después de apoderarse de A Coruña y destruir Santiago, “principal emporio de la superstición papal”, según ellos decían, pasar a Portugal. Con este motivo, el entonces Arzobispo de la Sede Compostelana, don Juan Sanclemente, convocó cabildo para tomar con toda urgencia las providencias que el caso requería. Entre las diversas medidas que se tomaron y que no vamos a detallar, pues están fuera de nuestro interés para la historia de Arzúa, figura el alarde ordenado por el Arzobispo en todas las jurisdicciones de la Mitra de todos los vasallos aptos para la guerra y les distribuyó armas, como arcabuces, espadas, picas, etc…

En la Historia de la Santa A. M. Iglesia de Santiago de Compostela, de Antonio López Ferreiro, de la que estamos tomando estas notas, se pone como muestra de estas provisiones el acta del alarde hecho el 29 de junio de 1589 en la villa de Arzúa. “En la villa de Arzúa y veintinueve días del mes de junio de mil quinientos y ochenta y nueve años -dice textualmente- en cumplimiento de lo que ha mandado su señoría el arzobispo, hizo juntar los vasallos de dicha jurisdicción y les repartió en los memoriales de atrás, según que en ellos se contiene y demás a los que fueron Rebeldes por juramento de los mayordomos en los dichos memoriales que juntamente van en dicho memorial, escritos de todo ello con cuenta y razón”.

Se citan, a continuación, los repartos realizados en diversas parroquias arzuanas. Citamos por curiosidad y como ejemplos tomados al azar, algunos nombres de personas y armas entregadas en cada una de ellas. En San Pedro de Mella aparecen Gómez Dafonso da Mella, a quien se le entrega un arcabuz, a Jacobo de Carril una pala, a Pedro Vázquez un legón, a Pedro Crespo con hijos una pala y un legón a él y a sus hijos… En Santa María de Viladavil se le entrega una lanza y una espada a Bartolomé dos Salgueiros, una longa espada y una pica a Bastián de Bouza, a Tomé da Fonte una espada y un legón… También aparecen los repartos en las parroquias de Calvos de Sobrecamiño, Burres y la misma parroquia de Arzúa. También se citan otros lugares que no pertenecen al municipio de Arzúa, pero sí lo fueron en su antigua jurisdicción, como Boimorto, Andabado, A Pastoriza y San Vicenzo de Arceo.

|Documento reproducido por López Ferreiro

Os lobos atacan o cabriolé que levaba o correo

A revista decenal “La ilustración gallega y asturiana” publicou o 28 de novembro de 1881 esta nova:

Arzúa. A la salida de esta villa en la noche del 20, unos cuantos lobos sorprendieron al conductor de un cabriolé que conducía la correspondencia desde Santiago á Lugo. El caballo se desbocó, arrojando al conductor en medio de la carretera, el cual á duras penas pudo llegar á Mellid. Desde este punto salió otro conductor en busca de cabriolé y caballo, los que, después de largo tiempo, han sido encontrados en un barranco.

“Todos á xunta, como a música de Arzúa” e outros ditos

No capítulo 191 do programa da TVG Ben Falado, logo de ocuparse da orixe do topónimo “Arzúa”, Xesús Ferro Ruibal fala, dende a praza da Quintana de Compostela, durante unhos 50 segundos dos ditos de Arzúa. Aquí queda o vídeo e a súa transcripción.

Se lles digo a miña verdade, cando me puxen a mirar os ditos de Arzúa sorprendeume en cantos sitios de Galicia xente de Arzúa e sinónimo de xente informal, xente de pouco fiar. E sorprendeume por que cando eu era pequeno, aquí en Santiago, Arzúa era o prototipo da boa harmonía: diciamos “todos á xunta como a música de Arzúa”.

Arzúa é importante, por que vostedes saben que Xan de Arzúa é personaxe principal da procesión do Corpus de Allariz e cando se estaba construíndo esta catedral cada peregrino traía cadansúa pedra para axudar á construción e hai unha cantiga de Arzúa que di “se a pedra é de Triacastela mira de hasta Arzúa poder con ela de alí a Santiago levarana nun carro para calear o templo de Santiago”. Abur.

O foro do hospital de San Antonio da Ponte de Ribadiso

No arquivo da Universidade de Santiago consérvase un documento do 28 de xuño de 1523 que leva o título de “Foro de la Cofradía de San Eloi de los plateros de Santiago a Rodrigo Sánchez de Boado, vecino de Santa María de Rendal, por su vida y 5 voces de la casa del Hospital de Ribadiso da Ponte sita en la dicha feligresía de Rendal”. Na guía de “Arzúa no camiño de Santiago”, publicada por Everest e o Concello de Arzúa en 1986 podemos ver un resumo deste interesante documento que nos serve para coñecer a historia do que hoxe é o albergue de Ribadiso. Este resumo, na páxina 12 da edición en galego, dí así:

En Ribadiso, xusto ó pasa-lo río Iso pola ponte vella, seguindo a antiga estrada romana, da que é testemuña a mesma ponte, hai unha casa en ruínas que foi o antiguo hospital de San Antonio de Ponte de Ribadiso para acollida e atención dos peregrinos, que estaba administrado polas Terciarias Franciscanas do Mosteiro de Santa Cristina da Pena, da cidade de Santiago. No ano 1523, a administración do devandito hospital levábaa a confraría de prateiros de Santiago. O 28 de xuño don Lope Muñiz, procurador da devandita confraría, e os confrares Pedro Martínez, Francisco Domínguez, Vicario da mesma; Gonzalo do Cabo, Rodrigo Fernández “O Mozo”, Jácome de Vite, Bartolomé Fernández, Domingo de Castroverde, Alfonso Ynes, García Oanes e outros, déronlle en foro a Rodrigo Sánchez de Boado, veciño da freguersía de Santa María de Rendal, a casa do hospital de Ribadiso da Ponte, con tódalas herdades e cousas a ela pertencentes, non sendo a casa de Ferreiros. Na carta de aforamento din os prateiros, que son administradores do hospital de Ribadiso da Ponte, e, polo mesmo: “vos lo aforamos segundo dicho es por tiempo precio e pensyon en cada un año de medio real de plata pago al procurador de la dicha cofradía que agora hes y al que por tiempo fuere por día de Corpus Cristi de en cada un año; e aveys de tener las dichas casas del dicho hospital llevantadas e reparadas, e camas e ospitalero en ellas que acoja a los peregrinos que al dicho hospital vinieren e les haga toda la caridad” (Rexistro 30, folio 2 020-2 030 número da Biblioteca da Universidade de Santiago).

|Documento completo do foro

“Morriña”, cantada pola coral de Arzúa na praza da Quintana

O domingo 31 de maio de 1981, dentro do programa das Festas de Ascensión de Santiago de Compostela, xuntáronse varias corais polifonicas nas “Xornadas de irmandade de coros galegos”. Froito dese encontro foi o LP ·Corales populares galegas en directo – Plaza de la Quintana-Santiago – Amigo 06-81-L”, que contiña 12 pistas:

01 – Coral Polifónica do Liceo de Noya – Bágoas e lumieiras
02 – Coral Polifónica de Vilaxoan – Rula
03 – Coral Voces do Son – O cruceiro do Son
04 – Coral Polifónica do Carballiño – Feliz primaveira
05 – Coral Polifónica das Pontes de García Rodríguez – Catro vellos mariñeiros
06 – Coral Polifónica de Ponteareas – Como chove miudiño
07 – Coral Polifónica de Arzúa – Morriña
08 – Coral Polifónica de Lestonac de Cangas – Brisiña
09 – Coral Atlántida de Matamá – Roseiriña
10 – Coral Polifónica Meigas e Trasgos de Sarria – O galopín
11 – Coral Colexiata de Sar – Mariñeiros
12 – Las Corales y el pueblo – Himno galego

Compartimos o corte número 7: “Morriña” interpretada pola Coral Polifónica de Arzúa.

Un cacique de Arzúa causa un escándalo no fielato de Compostela

Do feito que imos a relatar ocuparonse polo menos dous xornais: “El Correo de Galicia: diario independiente de avisos y noticias” do 12 de xaneiro de 1904 e “Gaceta de Galicia: diario de Santiago. Decano de la prensa de compostela” do día 13. A continuación reproducimos o texto publicado no Correo:

En el fielato de la Rúa de San Pedro hubo ayer un escándalo, del cual vamos á dar cuenta, según la versión oficial.

Llegó a dicho punto el coche que hace el recorrido entre esta ciudad y Arzúa, y en él venía, entre otros viajeros, el secretario de dicho Ayuntamiento, D. Faustino Rodríguez Montero.

Cumpliendo con su deber los empleados del resguardo, comenzaron á registrar el equipaje, y al llegar á la maleta del Sr. Rodríguez Montero le rogaron se dignase abrirla.

Debió creer el tal que se hallaba en sus dominios de Arzúa, donde los infelices paisanos tienen que sufrir con paciencia cuanto el cacique quiere, porque se negó terminantemente á satisfacer los deseos de los dependientes, á los cuales increpó duramente, los mismo que si se hallase en plena sesión de mansos polainudos, á los cuales hay que asustar para que firmen.

No desconocemos que hay ocasiones en que por parte de los consumeros se falta á las consideraciones debidas al viajero, pero tampoco se nos oculta que no es la primera vez que en ese fielato y por caciquillos de las montañas arzuanas, que por lo visto se creen con fueron en todas partes, se pretende atropellar á los encargados del mismo, olvidándose que una cosa es gobernar anchamente en los distritos rurales y otra muy distinta ser en los pueblos cultos uno de tantos, sujeto á derechos, pero sí también á deberes, que no se eluden pese á todos los padres políticos habidos y por haber.

Pola Gaceta do día seguinte sabemos da orientación política do secretario do Concello de Arzúa (gassetista) e o motivo polo que non quería que lle rexistrasen a equipaxe (os funcionarios non levaban luvas).