O ciclista de Arzúa Maximiliano López “El Rayo”, campión de Córdoba (Arxentina)

Polo xornal La Voz de Galicia podemos saber que a principios do século XX houbo un arzuán ciclista de nome Maximiliano López e colaborador da publicación de Bos Aires “El ciclista”. Maximiliano foi campeón da provincia arxentina de Córdoba e tiña seguidores en Francia. Era coñecido polo pseudónimo de “El Rayo”.

O 23 de agosto de 1901 o periódico coruñés publicou:

Hemos saludado ayer en esta redacción a joven D. Maximiliano López, distinguido colaborador de El Ciclista de Buenos Aires, y celebrado amateur del ciclismo en la República Argentina.

El Sr. López, campeón de Córdoba, provincia de dicha República, viene con objeto de visitar a su familia que cerca de La Coruña reside, y piensa salir luego para Francia, en donde el sport velocipédico tiene todavía entusiastas prosélitos.

E o mesmo xornal, o 12 de marzo de 1902, case sete meses despois conta que volta para Arxentina, supoñemos que de regreso do seu viaxe a Francia:

Hoy embarcará en este puerto para la República Argentina el joven y laureado ciclista Maximiliano López, que usa en achaques de pedal el pseudónimo de El rayo.

Este simpático carrerista tuvo la amabilidad de visitarnos cuando hace unos cuantos meses vino desde Buenos Aires a Arzúa, su pueblo natal.

Os emigrantes de Arzúa en Bos Aires organizan unha festa campestre

O 13 de xaneiro de 1929 o xornal “El Correo de Galicia: órgano de la colectividad gallega en la República argentina” publicou o seu número 1.199, que na páxina 4 contiña esta nota:

SOCIEDAD PARTIDO DE ARZÚA

Si esta popular y simpática entidad no nos tuviese ya acostumbrados al éxito rotundo de todos sus festivales, bastaría tan solo el pic-nic realizado el pasado domingo en Vicente López, para demostrarnos la pujanza y arrestos de su comisión de fiestas.

Destacábase claramente en la gran fiesta campestre de “Villa Belga”, el carácter galleguísimo de sus organizadores, pues al terceto típico del popular gaitero Manuel Varela, se unió la renombrada orquesta “Celta” que, tanto por su nombre como por su director, el conocido compositor J. Barreiro, supieron imprimir al festival el necesario prestigio.

Fué proclamada reina de la fiesta, la hermosa y simpática señorita Sira Caamaño, cuyo triunfo mereció la unánime aprobación de la concurrencia.

Sin tiempo ni espacio para hacer una crónica tan detallada como esta querida sociedad se merece, enviamos a sus dirigentes nuestras sinceras felicitaciones.

Unha copla: viva Arzúa e o lugar do Capelán

O 2 de marzo de 1918 o número 929 da publicación “Nova Galicia: revista semanal, órgano dos gallegos é pr’os gallegos n’as Amérecas” inclueu unhas coplas firmadas por Fortunato Cruces e adicadas ao seu amigo don Joaquín Gómez. Reproducimos a que se refire a Arzúa:

Viva Arzua, viva Arzua
y-o lugar de Capelán,
alí teño unha rapaza
esperándome outro vrán.

Un mozo de Lema fai deter en Bos Aires ao asasino do seu irmán

O número 437 do xornal “El Eco de Galicia: órgano de los gallegos residentes en las repúblicas Sud-Americanas”, que foi publicado o 10 de decembro de 1903 na capital de Arxentina, conta como un rapaz de Lema de 17 anos viaxou ata Bos Aires e fixo deter a quen, tres anos antes , asasinou ao seu irmán. Nesta páxina xa recollemos a nova daquel crime en Lema, e agora reproducimos o texto da nova de 1903:

Detención de un homicida.-El joven de 17 años Jesús León Rodríguez, recientemente llegado de Galicia, ha hecho detener en Buenos Aires á Angel Sanchez, de 23 años, cocinero, á quien acusa de haber dado muerte á su hermano José León Rodríguez, hecho ocurrido en la parroquia de S. Pedro de Lema, Arzúa, en junio de 1900.

Como la captura de dicho sujeto no ha sido solicitada por las autoridades españolas, la policia ha dado conocimiento de la detención a la Legación de España.

Recén casados apaleados

Na portada do número 2.431 do xornal “La Voz de Galicia” con data martes, 15 de outubro de 1889, na sección “Correo de Galicia” podemos ler:

Escriben de Arzúa que hace días un joven paisano, recien llegado de América, y que á su regreso habia contraido matrimonio con una linda muchacha de aquel partido judicial, fue cruelmente apaleado él y su consorte por un hombre, el cual habia sido padrino de la boda, y que pretendió robarle dinero para marchar a Buenos Aires, que le habia negado su apadrinado.

La negativa dió ocasión para que el matrimonio, que estaba en su luna de miel, fuese sorprendido por el cruel caco y fuese blanco de sus iras.