Un mal pirotécnico

Na páxina 9 do xornal “La Voz de Galicia” do 7 de setembro de 1932 Rey Alvite escribe na sección “Crónica de Santiago”:

José Seoane Castro, de 21 años, soltero, vecino de Villantime-Arzúa, para festejar el remate de la “malla” aprovechó la pólvora que guardaba en su casa con el propósito de fabricar una bomba, como así lo hizo y tuvo la mala suerte de que al prenderle fuego perdió la mano izquierda y se produjo heridas muy graves en diferentes partes del cuerpo. Ingresó en el Hospital.