O 8 de febreiro de 1895 o xornal “La Voz de Galicia” publicou a seguinte nova:
Noches pasadas, dos mozos vecinos de la parroquia de Oines, en el partido de Arzúa, pretendiendo dar una broma á su convecina Manuela Tojo realizaron un hecho que constituye un delito y que pudo tener lamentables consecuencias.
No se sabe como pudieron agenciarse una oveja muerta, y con ella dirigiéronse, cerca de la madrugada, á la vivienda de dicha mujer en la cual penetraron por una ventana, valiéndose para ello de una escalera.
Una vez dentro y con todo el sigilo posible depositaron la oveja en una cama, abandonado seguidamente la casa.
Juzguese cual sería la sorpresa de Manuela Tojo al descubrir á dicho animal, y contemplar la sangre que manchaba el pavimento y las ropas del lecho, tanto que es un principio, juzgando que se trataba de un crimen, estuvo á punto ser víctima de un accidente.
Uno de los autores de la broma, llamado Jose Mesias, soltero y de 20 años de edad, fue ya detenido por la fuerza de la Guardia Civil del puesto de aquella villa y entregado al Juzgado de instrucción.
Se sigue la pista al otro bromista sujeto