O cadaver tatuado que apareceu en Arzúa

En xuño de 1847 varios xornais publicaron unha curiosa nova, reproducimos gracias a Diego e Bernardo Cascón a versión publicada o 11 de xuño de aquel ano en “El tiempo”

En el Boletín oficial de la Coruña se lee un exorto espedido por el juzgado de Arzúa, en averiguación de quién sea un hombre que se ha encontrado muerto á mano airada en un monte de aquel partido. Las señas del cádaver son las siguientes: edad como de 50 años… en el pecho y lado derecho tenia una estátua grabada, y á sus partes laterales dos columnas, en el brazo derecho otra estátua que cubría un dosel par su parte superior, y en la inferior un rótulo que decía “soy de Isabel Troncoso.” En el brazo izquierdo tres marcas que en la parte inferior de una de ellas había también un letrero que al parecer decía “Isabel.” Igualmente se encontraren en la parte anterior y media de los muslos, otras dos figuras que en la parte inferior de la del derecho tenia un rótulo que decía “Soy de Carmen Castro,” advirtiéndose que esta figura tenia al lado derecho una niña, y en el izquierdo en la misma posición que la anterior un rótulo que decía “Soy de Inés Quijano”.

El infeliz había sido en vida un Lovelace, un Foblas. Enamorarse una vez es una falta disculpable, dos una locura, tres una tontería; pero pincharse el pellejo por ellas es el colmo de la bestialidad. Si este hombre hubiese vivido muchos años más y se hubiera entregado á las dulzuras del dibujo punzante, según lo cupido que manifestaba ser, su cuerpo hubiera sido un museo de queridas.

A segunda guerra carlista en Arzúa

Os historiadores do carlismo acostuman a silenciar o papel de Galiza na segunda guerra carlista (1847), pero o certo é que se fixo notar no país, e tamén en Arzúa. A continuación transcribimos o parágrafo que J.R. Barreiro Fernández adica a zona de Arzúa na II Guerra Carlista no seu libro de 1976 “El carlismo gallego”, de Editorial Pico Sacro (ISBN 8485170105):

Zona de Arzúa

También esta zona había demostrado su fidelidad a la causa carlista. Durante la primera guerra había mantenido ininterrumpidamente una o dos facciones: la de López* y Ramos. En el mes de agosto de 1847 hay noticias de la aparición de una pequeña facción al mando del Bachiller de Rodieiro y de un tal Marelas, natural de Dormeá. Ambos habían igualmente pertenecido a la primera campaña y eran carlistas indultados. Parece ser que esta facción tampoco tuvo éxito alguno y posiblemente se deshizo al enterarse de la desaparición de la partida del Ebanista en la que todos los carlistas gallegos tenían puestas sus ilusiones.

* No texto do libro mencionase á Gómez pero parece ser unha errata, a partida máis famosa da I Guerra Carlista foi a de don Antonio López, natural de San Estevo do Campo.

Este libro contén numerosas referencias a Arzúa ao longo de toda a historia do carlismo.